09 mayo 2007

El enclave maya de Chichén Itzá recobra su esplendor después de la restauración

CHICHÉN ITZÁ (MÉXICO).- A unas semanas de que se conozca si el enclave maya en el sureste mexicano Chichén Itzá será una de las siete nuevas maravillas del mundo, su pirámide principal ha recobrado su esplendor después de haber sido sometida a un proceso de restauración.

Un millón de personas visita cada año esta zona, lo que unido al riguroso clima tropical de la península de Yucatán, ha mermado el estado de los vestigios mayas, explica el director del enclave, Eduardo Pérez.

El proyecto general de conservación ha devuelto el brillo al Templo Mayor de la Gran Pirámide de Chichén Itzá, así como a una subestructura interna en donde hay dos reliquias mayas, un 'chac mool' (escultura que representa un dios) y un jaguar, que se encuentran en excelente estado.

Recuperado el esplendor de sus principales esculturas, relieves y templos se encuentra en óptimas condiciones para recibir diariamente a 5.000 turistas. Ese número puede llegar a 13.000 durante el equinoccio, cuando se produce una de las más impactantes demostraciones de la sabiduría maya con el fenómeno visual por el que parece descender una serpiente por la escalera.

La restauradora Claudia García Solís pasó más de dos meses limpiando cada centímetro cuadrado de piedra, removiendo el musgo que se había asentado sobre las esculturas y aplicando materiales en las juntas que el tiempo había deshecho.

El Templo Mayor se ubica sobre la estructura principal de la zona arqueológica de Chichén Itza, conocida como El Castillo o pirámide de Kukulcan, que es una gran pirámide de 55,5 metros por cada uno de sus cuatro lados, y con una altura de 25 metros.

La pirámide tiene amplias escalinatas que conducen al templo. La más importante es la escalera norte, donde se observa cada año, en el equinoccio, un impresionante fenómeno astronómico: el descenso a tierra de una serpiente que se forma con la sombra del borde de la pirámide.

Allí, donde alguna vez se cree que se ofrendaban sacrificios a los dioses mayas, ahora se instalarán medidores de humedad y temperatura para determinar si ese espacio puede volver a ser abierto de manera restringida al público.

Chichén Itzá es uno de los sitios que disputan estar entre las siete nuevas maravillas del mundo en un concurso que se realiza vía Internet y cuyo resultado se conocerá en julio.

Fuente: El Mundo

1 comentario:

Templario Azteca dijo...

El día de hoy leí en la jornada un artículo sobre paseos furtivos en chichen itza por la noche , los turistas son guiados por personal del hotel que se encuentra junto a la zona arqueológica. En fin...
Saludos!