Muchas de las 82 piezas de arte funerario de la muestra sobre Egipto que acoge el MAHE hasta el 25 de marzo se exponen por primera vez.
El Museo Arqueológico y de Historia de Elche (MAHE) ha iniciado una nueva etapa tras la marcha de la Dama al Museo Arqueológico Nacional, con la puesta en marcha de exposiciones que complementan la amplia oferta cultural de las instalaciones.
La primera de ellas es Egipto, el viaje a la eternidad, centrada en el arte funerario egipcio, que está acompañada por las imágenes del descubrimiento de la tumba de Tutankhamon y las excavaciones realizadas por Howard Carter.
La muestra llega a Elche merced a la colaboración con el Museo Egipcio de Barcelona y la Fundación Arqueológica Clos, que ha aportado 82 piezas de un enorme interés, muchas de las cuales se exponen por primera vez, e igualmente la secuencia completa de las excavaciones y el hallazgo de la tumba de Tutankhamon. Algo imposible hasta ahora ya que se encontraban divididas entre los museos de Nueva York y Londres.
El acceso es gratuito. Cuando el visitante entra en las dependencias del MAHE podrá optar entre meterse al museo en sí, o dirigirse por un pasillo a la exposición sobre el arte faraónico egipcio, que se encuentra en una sala independiente. Además como atractivo especial, a la entrada del MAHE se han instalado dos esfinges que representan una reproducción de las esculturas faraónicas del templo de Abu Simbel. Están elaboradas en piedra artificial y han sido donadas por la empresa Rocas y Diseño.
La exposición, como recordó el director-conservador del Museo Egipcio de Barcelona, Luis Manuel Gonzálvez Ortega, tiene un atractivo más si cabe. Rinde un homenaje especial a la ciudad y al palmeral, dada la especial vinculación que ha mantenido con la cultura egipcia. La palmera estaba considerada como un árbol de eternidad. Su rama servía para anotar el cómputo de los años, su madera se empleaba para la elaboración de sarcófagos y el vino de dátil era una de las ofrendas especiales para los difuntos.
En las imágenes que se exponen se puede contemplar al obrero Pashedu apagando su sed junto a una palmera, columnas palmiformes y palmeras en el tempo de Unas, una cucharilla en forma de palmera, reproducciones en columnas monolíticas de piedra para tumbas y templos, su uso como signo jeroglífico, o simplemente para dar sombra y apaciguar el calor.
Fantástico entorno.
Jordi Clos, presidente de la Fundación Arqueológica, aseguró sentirse «emocionado por el marco en el que se presenta esta exposición. Es un entorno fantástico y me ha sorprendido muy gratamente porque la exposición está perfectamente enmarcada. Además, del interés por las piezas que se muestran, la colección fotográfica es un hito porque es la primera vez que se puede contemplar completa, merced a las gestiones que realizó el Museo Egipcio de Barcelona».
Por su parte, el alcalde Diego Maciá, que agradeció la colaboración de la Fundación Arqueológica Clos, se mostró seguro de que «será una exposición muy visitada dada la calidad de lo que se ofrece».
Entre las piezas de la muestra se incluye una figura del dios Osiris en bronce, de entre el 664 al 525 antes de Cristo, una estatua funeraria de entre el 1070 y el 715 ante de Cristo, o la imagen de una portadora de ofrendas de entre el 2040 al 1640 antes de Cristo. También resulta curiosa la momia de un gato, de entre el 715 al 332 antes de Cristo.
El concejal de Cultura, José Manuel Sánchez, recordó que la de Egipto es la primera de las exposiciones que a lo largo del año acogerá el Museo Arqueológico y de Historia de Elche. «Estamos gestionando nuevas muestras. Las conversaciones están avanzadas, pero falta concretarlas», dijo.
Fuente: La Verdad.
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