La ciudad de Borja ha estrenado museo. El pasado 6 de mayo, en la fiesta de la Virgen de la Peana, abrió sus puertas el Museo Arqueológico de la localidad, ubicado en la antigua iglesia de San Miguel. Ayuntamiento de Borja y Centro de Estudios Borjanos han trabajado durante los últimos cuatro años en el proyecto, que ha dirigido el arqueólogo Isidro Aguilera. Manuel Jiménez Aperte ha diseñado los expositores y paneles informativos, que aúnan sencillez y modernidad.
En total, unos 350 metros cuadrados de exposición, en los que se ha reunido la colección que ha ido elaborando a lo largo de los años el Centro de Estudios Borjanos (CESBOR), junto a aportaciones realizadas por particulares. "Aproximadamente un 70 por ciento de las piezas son del CESBOR y el 30 por ciento restante de vecinos de Borja y comarca", señala Isidro Aguilera. Y añade: "En ningún momento el centro ha planteado conflictos con el Museo de Zaragoza. Las piezas más singulares encontradas en Borja y su comarca, como el 'Bronce de Agón', que es una inscripción romana, o el vaso campaniforme encontrado en Mallén, siguen en el Museo de Zaragoza. Lo que se buscaba era mostrar en condiciones la colección propia del CESBOR y, al tiempo, aprovechar un edificio como la antigua iglesia de San Miguel, que estaba infrautilizado".
Nueve bloques temáticos
El recorrido que propone el museo, estructurado en 13 vitrinas, arranca en el Paleolítico y, tras saltarse el Neolítico, periodo del que no se han encontrado yacimientos en el entorno de Borja, prosigue con el Calcolítico, la Edad de Bronce, Primera Edad del Hierro, la Celtiberia, Roma, el Islam y la Edad Media cristiana, para terminar el recorrido mostrando "La huella judía". En este apartado se exhibe una de las piezas más singulares de la colección, una inscripción judía que se encontró en el Cinto de Borja, realizada con un objeto punzante sobre yeso.
Dice "ze hamakom shel moshe eliashib linaro" ("éste es el lugar de Moseh al-lxibili"). Es la única inscripción judía encontrada en España fuera del ámbito funerario, y seguramente se refiere a Moisés, "el Sevillano", uno de los tres médicos que ejercían esta profesión entre la comunidad judía de Borja a principios del siglo XV.
Hay, también, objetos líticos, puntas de flecha, moldes de fundición, urnas funerarias, monedas, sarcófagos, molinos de cereales, broches, fíbulas, amuletos, vasijas, objetos de hueso... el repertorio clásico en los museos de arqueología.
"Hemos buscado ser muy selectivos con los objetos en exposición -subraya Isidro Aguilera-. Hemos preferido no apostar por el número, sino por la calidad. Creo que el recorrido es muy equilibrado: no hay muchas piezas, pero las que hay son escogidas. Y hemos preferido un modelo mixto de gestión. La colección es propiedad del Centro de Estudios Borjanos y el edificio del Ayuntamiento. Por eso, si algún día se dedica la iglesia de San Miguel a otro fin, la colección volvería a manos del CESBOR".
Según aseguraba Luis María Garriga en la presentación del centro, "nace esta exposición permanente con vocación de verdadero museo, por lo que no se renuncia a seguir trabajando para conseguir y desarrollar los servicios básicos que todo museo debe tener. Este museo es un primer paso, fruto de una labor constante desde hace un cuarto de siglo llevada a cabo por el Centro de Estudios Borjanos, pero no es el final, sino el prólogo de un trabajo futuro".
El museo, o exposición permanente, se puede visitar todos los fines de semana y festivos, de 12.00 a 14.00 y de 17.00 a 20.00. Para visitas a lo largo de toda la semana es preciso llamar previamente al Ayuntamiento de Borja.
El museo acaba de perfilar una interesante oferta cultural para la ciudad de Borja, ya que se une a otros espacios expositivos o en marcha. Es el caso del museo de la Colegiata, ubicado en un antiguo palacio renacentista y que en sus siete salas reúne importantes piezas de arte sacro.
Entre ellas, las piezas del antiguo retablo de la colegiata, uno de los mejores ejemplos de pintura gótica aragonesa. También se ha lanzado la idea de crear un centro de interpretación de la Judería y se trabaja en un futuro Museo del Rosario de Cristal. Otro proyecto en marcha es la creación de un museo dedicado al pintor y alcalde republicano Baltasar González.
Fuente: Heraldo
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