20 octubre 2006

Cartagena: El último tributo al profesor Beltrán.

Un grupo de cartageneros erige en los jardines del Museo Arqueológico Municipal un busto del padre de la arqueología cartagenera, fallecido en marzo.

El concejal de Cultura, José Cabezos, y el presidente de la Comisión Pro Homenaje, Diego Peñalver, descubrieron ayer el busto del que fuera fundador del primer Museo Arqueológico Municipal de Cartagena, Antonio Beltrán, erigido mediante suscripción popular.

El busto, obra del escultor Francisco Alarte, se halla en los jardines del Museo Arqueológico Municipal, que desde el año 2002 llevan el nombre de Beltrán, considerado como el padre de la arqueología en Cartagena.

A la ciudad llegó en 1942 para realizar el servicio militar y en 1943 fundó el primer Museo Arqueológico. También fue el impulsor de las primeras excavaciones que se realizaron en la ciudad y de los primeros congresos nacionales de arqueología.

Valor a las piedras.

«El de hoy [por ayer] es un homenaje por el esfuerzo que tuvo este hombre por Cartagena en los años cuarenta y cincuenta. Fue precursor de una serie de arqueólogos, cuyo trabajo ha hecho de este lugar una ciudad arqueológica. Él así lo reconocía desde que la gente empezó a darle importancia a esas piedras que él descubría. Ahora todos pensamos que esas piedras tienen valor, pero fue él quien convenció a todo el mundo en una época difícil. Hablamos de un hombre heroico que se puede situar al nivel de Pedro San Martín o Julio Mas», comentó ayer el concejal Cabezos.

Su labor fue muy fecunda y siempre recordada, a pesar de que sólo estuvo siete años en Cartagena. En 1949 volvió a Aragón, su tierra natal, tras conseguir la cátedra de Arqueología de la Universidad de Zaragoza. No obstante, siempre mantuvo una estrecha relación con Cartagena, a donde acudía regularmente.

Presidente de la Comisión de la Unesco para el Arte Rupestre Prehistórico y Medalla de Oro Santa Isabel de Portugal de la Diputación Provincial de Zaragoza, su ligazón con Cartagena se reforzó por la muerte, en los años cuarenta, de un hijo neonato en la ciudad. «El venía a visitarlo. Tenía sangre de su sangre en Cartagena», recordó el arqueólogo y profesor universitario Javier García del Toro, quien no quiso perderse el homenaje a su maestro.

También estuvieron presentes en el acto la arqueóloga Elena Ruiz Valderas y un amplio número de miembros de la Federación de Carthagineses y Romanos. No en vano, a juicio de muchos, el homenajeado fue «inspirador» de las fiestas históricas. Allí estaban su presidente, Luis Suárez; junto a su esposa, Gloria Caballero; y la vocal de Cultura, Clara Heredia.

En este último tributo, todos destacaron el intenso trabajo de Beltrán, autor de más de cien artículos y libros sobre la arqueología romana, en especial sobre la cartagenera. Como secretario de los Congresos Nacionales de Arqueología, acercó sus reuniones a Cartagena.

Fuente: La Verdad.

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