Arqueología para el turismo

Importantes sitios arqueológicos están siendo habilitados para el turismo a través de programas de recuperación, a cargo del INC y del Mincetur. El sector se beneficiará

A través de un convenio de Cooperación entre el Instituto Nacional de Cultura (INC) y el Mincetur, se ha llevado a cabo durante el año 2005, y se continuará en el 2006, un programa de recuperación de monumentos arqueológicos e históricos a través del Plan Copesco nacional. Este último es un órgano de ejecución del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo que tiene como finalidad la coordinación de proyectos de inversión pública de desarrollo turístico a nivel nacional.

Uno de los objetivos del Mincetur es la diversificación de la oferta turística en el país. En este marco, las intervenciones están localizadas en monumentos con potencialidades de uso turístico y ubicados en un circuito o corredor turístico que cuenten con una población y gobierno local organizados. Esto garantizaría la gestión y el mantenimiento del monumento una vez recuperado. Otro factor importante ha sido también que los sitios cuenten con una accesibilidad vial en condiciones regulares.

Los sitios arqueológicos que cumplen con estos requisitos y que han sido intervenidos durante el 2005 son principalmente: Kuélap en Amazonas, Chavín en Áncash, Túcume y Batán Grande en Lambayeque, Chan Chan en La Libertad, Pachacámac y Caral en Lima, Huari en Ayacucho y Kotosh en Huánuco. Para el año 2006 se continuará con los trabajos en los sitios de Pachacámac, Kuélap, Chan Chan y Túcume entre otros.

Los trabajos realizados en los sitios han sido básicamente de investigación, conservación y habilitación de la infraestructura para el turismo. Según Jorge Chávez Rodríguez, director ejecutivo del Plan Copesco nacional, la importancia de invertir en esta clase de monumentos se debe principalmente a que el mayor porcentaje de turismo receptivo en nuestro país está relacionado con el turismo cultural, ya que el Perú ofrece un importante legado arqueológico de diferentes culturas en todo el territorio nacional. Esto constituye una excelente oferta turística que requiere ser puesta en valor así como una mejora en la infraestructura de acceso y servicios. De esta manera se podrá dar el gran salto en el crecimiento de los flujos de visitantes y con ello conseguir un mayor beneficio económico para el desarrollo de las poblaciones.

Hasta ahora los resultados de este importante programa han sido principalmente la recuperación de áreas en Kuélap que estaban en peligro de colapso y el acondicionamiento de una nueva zona para uso turístico y la solución de problemas de accesibilidad. En Chan Chan se ha trabajado en el museo de sitio, se ha incorporado el palacio Velarde en la ruta de visitas y se han realizado importantes hallazgos arqueológicos que serán próximamente exhibidos al público. En el caso de Pachacámac, se abrirá después de 20 años el famoso Acllahuasi y el sector de pirámides con rampa, que representa la mayor área construida del complejo. En Huaca de Luna se está dotando de buenos accesos al monumento y se incorporará la campiña de Moche a la actividad económica que genera el monumento. Asimismo, en Choquequirao, proyecto financiado conjuntamente con el fondo Contravalor Perú Francia, se están realizando trabajos de restauración y generando áreas para la visita turística construyendo caminos.

El monto invertido en estos programas asciende a 4 millones de soles y se espera crear un fondo para la recuperación de monumentos arqueológicos en emergencia, conjuntamente con el sector privado de inversión turística.

El uso público de estos sitios renovados adquirirá una mayor dinámica con talleres de capacitación a la población aledaña en materia de gestión cultural y turística.

Los resultados de los trabajos serán dados a conocer próximamente en una exposición en el museo de la Nación organizada por el INC y Mincetur.

Trabajo con la comunidad

Los trabajos de puesta en valor de los diversos monumentos están orientados hacia el fomento de un turismo responsable. Por este motivo, estos se vienen realizando en coordinación con la población y gobiernos locales, los cuales ven en el turismo una ruta viable para el desarrollo de su región y de sus comunidades. Acciones conjuntas como estas generan desarrollo humano.

Fuente: El Comercio