Manuel Pérez Gutiérrez ha investigado elementos del castro como el altar, un muro y una roca gracias a una beca de la Institución Gran Duque de Alba, dependiente de la Diputación.
FRANCISCO J. MARTÍNEZ / ÁVILA
Cada 25 de diciembre, aproximadamente, la escalera superior del altar del castro de Ulaca se cubre de sombra, coincidiendo con el solsticio de invierno. Es uno de los muchos marcadores astronómicos que se encuentran en el castro de Ulaca y que han sido estudiadas por el profesor de Astronomía Manuel Pérez Gutiérrez, de la Escuela Politécnica Superior de la Universidad de Salamanca.
El estudio se ha llevado a cabo en el último año y está financiado por la Institución Gran Duque de Alba, organismo dependiente de la Diputación Provincial de Ávila. El investigador ha descubierto cómo los habitantes del castro de Ulaca utilizaban «elementos astronómicos para saber en qué momento del año se encontraban», declara Pérez Gutiérrez. De esta forma, coincidiendo con las cuatro fiestas importantes de los celtas (Sahaim -1-XI-, Imbolc -20-II-, Beltaine -10-V- y Lughnasad -13-VIII-) diversos signos se manifiestan en elementos del castro como la escalera interior del altar, que queda en sombra, el muro del altar, que proyecta su sombra de una determinada forma, o la gran roca que se sitúa sobre un canchal, donde el sol se coloca exactamente encima de ella.
Además, la orografía supone otros signos, como la Paramera, el Pico Zapatero, la Sierra de Ojos Albos o la Ermita del Risco, entre otros, y la colocación de los astros con respecto a ellos. Hay un marcador lunar que sólo repite la misma situación cada 19 años, conocido en el lenguaje científico como ciclo metónico.
El profesor Manuel Pérez Gutiérrez también ha estudiado la situación de estrellas como Orión, las Pléyades o Sirio.
Es la primera vez que se realiza una investigación tan exhaustiva en los asentamientos celtas y vetones del nororeste de la Península Ibérica, tal y como aseguró el profesor Manuel Pérez Gutiérrez, que anunció que, aunque sea de «forma personal» continuará sus trabajos en otros castros de la provincia abulense.
Por su parte, el presidente de la Diputación Provincial de Ávila, Agustín González, destacó que este trabajo saca a la luz «la realidad y profundidad de aquellos pensadores», como fueron los celtas y los vetones.
El estudio no se quedará en el plano astronómico únicamente, ya que, según confirmó el director de la Institución Gran Duque de Alba, Carmelo Luis, será facilitado a los expertos de Historia Antigua de este organismo para que cotejen los datos puramente astronómicos con los culturales de estos pueblos prerromanos para intentar entender algo más de estas culturas que dominaron la provincia abulense.
Fuente: Diario de Ávila
El estudio se ha llevado a cabo en el último año y está financiado por la Institución Gran Duque de Alba, organismo dependiente de la Diputación Provincial de Ávila. El investigador ha descubierto cómo los habitantes del castro de Ulaca utilizaban «elementos astronómicos para saber en qué momento del año se encontraban», declara Pérez Gutiérrez. De esta forma, coincidiendo con las cuatro fiestas importantes de los celtas (Sahaim -1-XI-, Imbolc -20-II-, Beltaine -10-V- y Lughnasad -13-VIII-) diversos signos se manifiestan en elementos del castro como la escalera interior del altar, que queda en sombra, el muro del altar, que proyecta su sombra de una determinada forma, o la gran roca que se sitúa sobre un canchal, donde el sol se coloca exactamente encima de ella.
Además, la orografía supone otros signos, como la Paramera, el Pico Zapatero, la Sierra de Ojos Albos o la Ermita del Risco, entre otros, y la colocación de los astros con respecto a ellos. Hay un marcador lunar que sólo repite la misma situación cada 19 años, conocido en el lenguaje científico como ciclo metónico.
El profesor Manuel Pérez Gutiérrez también ha estudiado la situación de estrellas como Orión, las Pléyades o Sirio.
Es la primera vez que se realiza una investigación tan exhaustiva en los asentamientos celtas y vetones del nororeste de la Península Ibérica, tal y como aseguró el profesor Manuel Pérez Gutiérrez, que anunció que, aunque sea de «forma personal» continuará sus trabajos en otros castros de la provincia abulense.
Por su parte, el presidente de la Diputación Provincial de Ávila, Agustín González, destacó que este trabajo saca a la luz «la realidad y profundidad de aquellos pensadores», como fueron los celtas y los vetones.
El estudio no se quedará en el plano astronómico únicamente, ya que, según confirmó el director de la Institución Gran Duque de Alba, Carmelo Luis, será facilitado a los expertos de Historia Antigua de este organismo para que cotejen los datos puramente astronómicos con los culturales de estos pueblos prerromanos para intentar entender algo más de estas culturas que dominaron la provincia abulense.
Fuente: Diario de Ávila
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